Existen lugares y circunstancias del Ser que deben ser transmitidos. Durante estas semanas últimas, por suerte, las lluvias han vuelto a abrazarnos enriqueciendo de ese modo nuestros campos. Damos gracias que en nuestro municipio esté lloviendo muy bien, sin tener que lamentar daños mayores por el temporal. Todo ello invita a la introspección y la escucha atenta, del mismo modo que realizamos en nuestras clases de mindfulness, taichí, yoga y/o chikung de TAISHA-CENTRO DE REDUCCIÓN DEL ESTRÉS (por cierto, te invitamos a probar una clase gratis presencial o chikung online).
Los momentos de lluvia son espacios que pueden ser aprovechados con un paseo en la naturaleza que conectan todos los sentidos.
Y ese ha sido el aprovechar de la tarde del pasado domingo. Bajo una cortina de agua, que a cada paso que daba en las ondulantes sendas de la sierra del Carche, me retornaba
a recuerdos entre montañas de ese Camino de Santiago realizado en solitario hace nueve meses.
El aroma a romero y pino se acrecenta a nuestros olfatos por la limpieza y frescura del agua que todo lo limpia y transparenta. Los colores se vuelven vivos, y la propia naturaleza asemeja un impulso como de querer hablar, de querer decirnos algo…Mientras los oídos escuchan la melodía sonora del chapoteo del agua entre surcos de piedras y tierra, me dejo totalmente embriagar en el caminar. No importa la humedad, ni el agua, ni el barro…son momentos en los que te das cuenta de que tienen que ser aprovechados porque son únicos y escasos, y además aportan paz y calma a tu existencia. Es un auténtico paseo de meditación mindfulness, caminando de manera informal junto a la alegría y vitalidad de mi perrita, que es la misma representación de vivir con plenitud el momento presente.
¿En qué aprovechas tú los momentos únicos de tu vida? ¿TE LO HAS PLANTEADO ALGUNA VEZ? ¿Qué es lo realmente importante en tu vida?
Te mando un fuerte y cálido abrazo, lleno de presencia y gratitud. Que tengas un bello día.
